Un muerto por día en la frontera

En los últimos 13 años han perecido 4,500 inmigrantes

Jorge Morales Almada
jorge.morales@laopinion.com
18 de octubre de 2007

Trece años de mala fortuna han tenido los migrantes desde que en octubre de 1994 el gobierno de Estados Unidos estableció la Operación Guardián.

Desde entonces, la cifra negra en la frontera promedia un migrante muerto cada día.

Durante su reciente visita a Los Ángeles, el quinto visitador general de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) de México, Mauricio Farah, denunció la política de contención en la frontera, la cual ha generado que los migrantes busquen lugares más inhóspitos y riesgosos para cruzar hacia el norte.

"En una década, Estados Unidos ha optado por gastar alrededor de 30,000 millones de dólares en vigilancia, por aumentar de seis mil a 18 mil el número de agentes de la Patrulla Fronteriza, por multiplicar los tramos de barda y por instalar más tecnología", dijo Farah.

Y cuestionó: "¿Qué hubiera pasado, por ejemplo, si en lugar de gastar 30,000 millones de dólares en reforzar la vigilancia en la frontera, Estados Unidos hubiera optado por invertir esos recursos en programas regionales de cooperación para el desarrollo?".

El representante de la CNDH aseguró que en esos 13 años la migración a Estados Unidos no se ha contenido y en cambio ha crecido, así como ha crecido el negocio de los traficantes de personas y la violencia en la frontera.

A pesar de todas las medidas de seguridad, indicó Farah, fue en el sexenio del ex presidente mexicano Vicente Fox cuando más migración se registró hacia el norte, de 450 mil a 500 mil por año. Y el período con mayor número de migrantes muertos en la frontera: 2,549.

Comentó que la tragedia en la frontera es tan cotidiana que parece pasar inadvertida.

"De tanto verse ha nublado la mirada, de tanto repetirse ha terminado por adormecer la conciencia gubernamental de los países", mencionó.

Una estimación de la Coalición Pro Defensa del Migrante y de la California Legal Rural Assistance Foundation, basada en datos de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, durante esos 13 años van más de 4,500 migrantes muertos en la frontera… Y contando.

"En 13 años de la Operación Guardián los resultados serían más de 4,500 muertes de migrantes, debido al incremento de las medidas de contención que hacen que la migración se vaya a lugares más peligrosos", dijo Esmeralda Siu, representante de la Coalición Pro Defensa del Migrante, una asociación con base en Tijuana, México.

Las cifras, calificó Siu, son alarmantes, ya que los dos años anteriores han sido los peores, con 516 muertes en 2005 y 485 en 2006.

Durante los primeros seis meses del 2007 la cifra negra ya iba en 232, por lo que estas organizaciones temían, considerando que la temporada fuerte de calor aún no estaba contabilizada, se pudiera llegar a niveles récord.

"Mientras avanza la construcción del muro, las indicaciones son que este año podría convertirse en el peor año en lo que respecta a las muertes durante el cruce", destacó en un comunicado Claudia Smith, directora de la California Legal Rural Assistance Foundation.

La Operación Guardián, considerada por estos grupos pro migrantes como una estrategia para desviar el tráfico indocumentado a lugares más apartados y peligrosos, se puso en marcha en San Diego el 1 de octubre de 1994 con el objetivo de cerrar el paso a los migrantes que intentaban el cruce por Tijuana.

"Fue el modelo para el resto de la frontera. Y ha resultado tan inútil como mortal", destaca el comunicado. "Entre la falta de oportunidades en México y el recrudecimiento de las políticas antiinmigrantes en Estados Unidos, el panorama es desolador".

Wendy Lee, portavoz de la Patrulla Fronteriza, dijo que durante el último año fiscal en el sector de San Diego se registraron 16 muertes de migrantes, la gran mayoría por deshidratación.

Pero a nivel nacional, según datos proporcionados por Ramón Rivera, jefe de comunicación de la Patrulla Fronteriza en Washington, de octubre de 2006 a agosto de 2007 (en 11 meses), en toda la frontera se contaron 371 indocumentados muertos.

Estimó que la cifra no superará el récord registrado en los dos años anteriores, que es de 494 en 2005, y 453, en 2006. (Las cifras no coinciden con las de las organizaciones debido a que se cuentan en períodos diferentes).

En esos años, consideró, se dio un mayor registro de muertes debido a que la presencia militar, de la Guardia Nacional, además del despliegue de más agentes, construcción de otros tramos de cerco y utilización de equipo sofisticado; obligó a los "coyotes" a llevar a los migrantes por lugares de más difícil acceso.

Al establecerse este año el Operativo Border Star, para rescatar a migrantes en riesgo, dijo Rivera, se ha logrado detectar a más de mil personas en peligro de perecer.

"Si no fuera por este equipo el número de muertes sería más alto", dijo el portavoz nacional de la Patrulla Fronteriza.

El abandono de migrantes por parte de los "coyotes", consideró, es uno de los factores que llevan a los indocumentados hacia la ruta de la muerte.

Un estudio realizado por el Instituto de Binacional de Migración (BMI) de la Universidad de Arizona, destaca que de 1990 a 1999, los cadáveres que eran revisados por el servicio médico forense del condado de Pima, en Arizona (zona desértica utilizada por los traficantes de personas), era en promedio de 14 al año, pero de 2000 a 2005, la cifra subió a 160, algo que los autores del estudio llamaron "efecto embudo".

El profesor Wayne Cornelius, profesor de asuntos migratorios en la Universidad de California en San Diego, pone en contexto las 2,978 muertes en la frontera registradas sólo de 1995 a 2004, según una cita tomada de ese mismo estudio del "efecto embudo".

"La fortificada frontera de Estados Unidos con México ha sido 10 veces más mortífera para los migrantes de México durante los pasados nueve años que el Muro de Berlín lo fue para la Alemania del Este durante sus 28 años de existencia".

Tomado de: http://www.laopinion.com

Duelo. Un hombre reza frente a un altar erigido junto a la valla que separa Tijuana de San Ysidro, en California. (AP)